Hola bonia comunidad , algunas veces comprar algo ahora y saldar la cuenta después puede parecer atractivo cuando queremos cambiar de teléfono. Pero si no lo controlamos, esto puede terminar en un lío llamado “sobreendeudamiento”.
Hablando de sobreendeudamiento, hay dos tipos principales: el pasivo, cuando surgen gastos inesperados como perder el trabajo y no poder cumplir con lo que debes; y el activo, que ocurre cuando agarramos más deudas de las que podemos pagar.
Pero ¿Cómo saber si estás atrapado en el sobreendeudamiento?
Aunque parece fácil notar que el dinero que entra no alcanza para lo que debes, algunas veces nos engañamos con pensamientos financieros que nos juegan en contra. Así que es bueno estar al tanto de algunas señales de alarma que nos indican que las cuentas no cuadran:
- Dinero ajustado: Si llegas a la caja del super o la gasolinera y sacas la tarjeta de crédito o pides un préstamo porque tu bolsillo anda en las últimas.
- Pagar una deuda con otra: Si usas un préstamo o adelanto en la tarjeta para pagar lo que debes en la misma tarjeta o en otra deuda.
- Pagos atrasados: Si a veces se te pasa pagar algo, ya sea pequeño o grande, por falta de fondos en el momento.
- Cuentas desequilibradas: Cuando no sigues la regla de dividir tus ingresos en 50% para necesidades, 30% para gastos extra (como lujos o salidas) y 20% para ahorrar.
¿Cómo salimos de este enredo?
Si ya sabes que estás en problemas o a punto de caer en la trampa, es hora de evaluar tu situación financiera y hacer un plan para salir. Si no lo haces pronto, las deudas crecen, los intereses suben, puedes terminar en buró de crédito y tu bolsillo sufrirá más.
Aquí hay algunos consejos para que retomes el control de tus finanzas y dejes atrás las deudas:
¡Nada de nuevas deudas!: Primero, corta o limita al máximo el uso de tarjetas y préstamos para gastos. Así evitarás aumentar lo que debes.
Recorta gastos innecesarios: Como el objetivo es reducir lo que debes, mira dónde puedes recortar gastos. Puedes cancelar temporalmente cosas como suscripciones o lujos.
Diseña un plan: Organiza tus pagos en un calendario que tome en cuenta tus ingresos y las fechas de vencimiento. Así sabrás cuánto pagar cada mes y podrás ajustarte si es necesario.
¿Cómo puedo evitarlo?
Ya sea que hayas pasado por esto o quieras evitarlo, la palabra clave es planificación. Mantén un equilibrio entre lo que entra, lo que sale y lo que ahorras con estos consejos:
- Maneja bien créditos y préstamos: Las tarjetas y los préstamos pueden ser útiles si los usamos con cabeza. Evita excederte y no uses más de lo que realmente necesitas.
- Haz un presupuesto: Anota todos los gastos e ingresos para no pasarte y caer en deudas. Así evitas gastos pequeños que suman y atacan al ahorro.
Gasta con prudencia: Ahorrar es la mejor manera de comprar lo que deseas, pero si necesitas financiamiento, piénsalo bien. Reflexiona sobre cómo afectará tus finanzas en el futuro.
Recuerda, el control financiero es clave para una vida tranquila. ¡No dejes que las deudas te dominen!
¿Qué otro consejo compartirías con la comunidad?